El espíritu del rock´n´roll...

La otra noche di una fiesta en casa. Era la noche del rock´n´roll. En un lugar como éste, donde la contaminación acústica es, valga la comparación, totalmente chernobílica…. Tachán, tachán: Vino la policía a mi casa. Que la fiesta no estaba autorizada y que se había terminado.
Reflexiones.
Probablemente fuera culpa de las guitarras. Aquí, hay sábados por la noche en que se juntan tres fiestas en la zona, con la música a toda leche. Aunque esa música es zouk. El zouk es una música proveniente de la Martinica. La que aquí se escucha no tiene seso y los caboverdianos la usan para restregarse con las chatis (y ellas encantadas). Vendría a ser como el pop electrónico de Viceversa pero más malo aún. Lo “bueno” que tiene es que lo pueden escuchar tus padres. O sea, no es rock´n´roll. Y mi rock´n´roll molestaba. Y el zouk de los cojones nunca molesta.
El desenlace: abandonamos la terraza y bajamos al salón y seguimos con la fiesta, donde hubo de todo menos fútbol.