jueves, junio 08, 2006

Viva la Benemérita (cualquiera)

Hace un par de semanas, de madrugada, en Lisboa, la policía de tráfico aprovechó el peaje de una autopista para, durante un par de horas, parar a TODOS los vehículos que por allí cruzaron. En total fueron 110. Detuvieron a 40 conductores. 32 por alcoholemia (no se sabe cuánta), 5 por la documentación (sí, los papeles) y 3 por tráfico de drogas (tampoco se sabe QUÉ llevaban, para hacer una aserción así).
Pero lo bonito fueron las palabras del policía que dirigía la operación: “La intención de este tipo de acciones es que la gente sepa que no pueden estar tranquilos infringiendo la ley. Podemos atraparlos en cualquier momento”.
George Orwell se quedó corto en 1984. De aquí a poco nos instalarán telepantallas en casa o un chip en el culo para saber cuando vamos a cagar. Sólo que los controlados, en este caso, van a ser los proletarios y no los del partido.